La propuesta se fundamenta en la adaptación del entorno de la iglesia de Nuestra Señora de la Victoria a la normativa de accesibilidad y no discriminación, mediante la creación de espacios públicos urbanizados y áreas de uso peatonal que garanticen la circulación autónoma y continua de todas las personas.

Las actuaciones previstas contemplan la incorporación de diferentes usos e instalaciones necesarias para el óptimo funcionamiento del espacio público, así como la reconstrucción de aquellos elementos estructurales deteriorados por el paso del tiempo, con el fin de dotar al entorno de mayor calidad arquitectónica y poner en valor la edificación catalogada.

Toda la propuesta se desarrolla conforme al criterio de máximo respeto e integración con los valores del BIC Monumento, evitando que la configuración de rampas u otros elementos vinculados a las necesidades del programa adquieran un protagonismo excesivo o afecten negativamente a la percepción del Monumento.